Las hermanas mataron a su padre mientras descansaba en un sillón. Las jóvenes María de 17 años, Angelina de 18 y Krestina de 19 años lo apuñalaron y lo golpearon a martillazos para terminar, según declararon ante la Justicia, con los años de torturas y violaciones que sufrieron.
La esposa de Mikhail Khachaturyan lo abandonó para evitar que sus constantes maltratos le costaran la vida, y habría sido tanta la desesperación de la mujer que decidió separarse de sus tres hijas cuando eran chicas, con tal de alejarse del abusador.
Una vez que la mamá se fue el calvario se trasladó a las niñas que lo habrían soportado por más de una década, hasta que dijeron basta.
Las hermanas aseguran que su padre las golpeaba, maltrataba verbalmente, abusaba sexualmente de todas ellas, y en ocasiones las violaba. Además controlaba toda su vida porque puso varias cámaras de seguridad en la casa, y las vigilaba por ahí cuando salía a trabajar.
Tan mal era el estado sicológico de las niñas que una de ellas incluso habría intentado suicidarse.
A pesar de que el hecho ocurrió en 2018, la noticia tomó nuevamente actualidad porque la justicia rusa podría condenarlas a entre 8 y 20 años de prisión por el parricidio. Hasta el momento, están detenidas con arresto domiciliario.
La defensa de las jóvenes exige que la corte considere el maltrato recibido durante toda su vida de parte del occiso, y además pidió que el papá del año sea juzgado aunque ya no esté en este mundo.