La Organización Mundial de la Salud, clasificó la adicción a los videojuegos como una enfermedad mental. La lista actualizada entró en vigencia el viernes pasado (11.02.2022) al ser publicada por el organismo, tras aprobarla en su asamblea de mayo de 2021.

 «La adicción a videojuegos se caracteriza por un patrón de comportamiento de juego persistente o recurrente (a juegos digitales o videojuegos), que puede ser en línea (es decir, a través de Internet) o fuera de línea», explica la OMS en la nueva lista de enfermedades.    

Entre los rasgos que distinguen a las personas con este trastorno, se distinguen tres: la falta de control sobre juego, tanto el momento en que se producto, la duración o el contexto; el aumento de la prioridad sobre el resto de actividades vitales; y la continuación o intensificación del juego a pesar de las consecuencias negativas en la persona.

Son más de 1,6 millones de casos clínicos en los últimos 30 años, los clasificados en la undécima Clasificación Internacional de Enfermedades de la OMS. Con esta inclusión, la Organización Mundial de la Salud busca mejorar las estadísticas sobre este trastorno. Esto se debe a que los estudios realizados antes de esta estandarización las cifras han mostrado cifras muy variables, oscilando desde el 1% hasta el 50% de la población en Asia.